La Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que azotó el sureste de España en septiembre ha sido clasificada como uno de los 15 desastres climáticos más devastadores de 2019 por Christian Aid, una organización internacional contra la pobreza. Este fenómeno extremo, potenciado por el cambio climático, afectó gravemente a las zonas de Valencia, Alicante, Málaga y Baleares, dejando un saldo de 7 muertes y pérdidas económicas de aproximadamente 2,400 millones de dólares.
El informe «Contando el costo de 2019: un año de descomposición climática» también destaca que la DANA provocó una serie de estragos: escuelas y aeropuertos cerrados, cerca de 3,500 evacuados, y el despliegue de más de 1,100 militares para asistir en las áreas afectadas. La intensidad de las lluvias en Valencia rompió récords históricos, alcanzando hasta 40 cm en algunas zonas, el equivalente a un año de precipitaciones en solo 24 horas.
A nivel global, el informe identifica otros eventos climáticos de gran impacto, como incendios en California, tifones en Japón y ciclones en África e India. Muchos de estos desastres, asociados al cambio climático, provocaron millonarias pérdidas y cobraron miles de vidas, afectando en gran medida a comunidades vulnerables.
El informe subraya la urgencia de mitigar el cambio climático y destaca el enorme costo humano y económico de estos eventos extremos en todo el mundo, especialmente en los países en desarrollo, donde las pérdidas humanas superan con frecuencia a las financieras.

