La sensibilidad en los senos es una de las principales preocupaciones de las mujeres que se someten a cirugías mamarias. El cirujano plástico, reconstructivo y estético Dr. Luis Bonetti explicó que es común experimentar alteraciones en el postoperatorio inmediato debido a la manipulación de los tejidos y nervios, aunque en la mayoría de los casos estos cambios son transitorios y reversibles.
Según el especialista, la pérdida permanente de sensibilidad es poco frecuente y la recuperación depende de diversos factores, como la técnica quirúrgica, el tipo de procedimiento, la anatomía individual de la paciente, los cuidados postoperatorios y la extensión de la cirugía. “La preservación de los nervios cutáneos, especialmente los que inervan la areola, es clave para mantener la sensibilidad”, puntualizó.
El impacto varía de acuerdo con el procedimiento. En los aumentos mamarios con implantes, los cambios suelen ser menores y pasajeros, mientras que en reducciones y levantamientos, donde se manipula mayor cantidad de tejido, el riesgo aumenta, aunque la sensibilidad tiende a mejorar con el paso del tiempo.
El doctor Bonetti explicó que la recuperación es gradual y, en la mayoría de los casos, ocurre entre los 6 y 12 meses posteriores a la cirugía.
Recomendaciones
El especialista aconseja seguir de manera estricta las indicaciones médicas para favorecer la recuperación:
- Evitar traumatismos o presión excesiva en la zona.
- Evitar movimientos bruscos con los brazos.
- Cumplir con los controles médicos programados.
“El tiempo, los cuidados postoperatorios y una cicatrización adecuada son los principales aliados en la recuperación sensitiva”, destacó.
Más allá de lo físico
El cirujano resaltó además la importancia de manejar las expectativas emocionales. “Una comunicación clara antes de la cirugía ayuda a que la paciente entienda que los cambios en la sensibilidad suelen ser temporales. Acompañar emocionalmente y ofrecer información realista brinda seguridad y confianza en el proceso”, concluyó.

